Si durante años nos hemos ido separando de la naturaleza tras el cemento y el asfalto de nuestras ciudades, hemos limitado el contacto con la naturaleza en nuestras escuelas, hemos ido centrando el ocio familiar en las propuestas de los Centros Comerciales, ... con la tecnología nos parapetamos tras nuestras pantallas allá donde nos encontremos incluso aunque estemos en el campo.
En el año 2005 Richard Louv acuñó el término "déficit de naturaleza" en su libro “Last Child in the Woods”. En él advertía de la pérdida de relación entre el ser humano y su entorno natural. Y afirmaba que la falta de contacto con la naturaleza que tienen los niños y niñas, tanto en la escuela como en su tiempo de ocio, causa problemas para su desarrollo integral como personas. Falta de autonomía, creatividad, capacidad para concentrarse, etc. son algunos de esos problemas. Pero incluso la salud y el desarrollo físico pueden resentirse.
No es el objetivo de este post profundizar en ello, pero Heike Freire (Educar en Verde) afirma que: "Los niños necesitan la naturaleza. Se sienten espontáneamente atraídos por ella y, en contacto con ella, se desarrollan de forma más saludable a todos los niveles"
Mentalmente está demostrado que despierta su curisosidad y aumenta su creatividad, incrementa su capacidad de atención, mejora su concentración, …
Emocionalmente el contacto con el medio natural nos conecta con nuestra esencia, nuestros orígenes. En definitiva con lo que somos. Y también los niños y niñas lo experimentan si se les deja jugar con la tierra, el agua, los animales, …
Y físicamente es innegable que favorece el desarrollo de sus sentidos y pone a “tono” el cuerpo (fuerza, equilibrio, coordinación, …).
Pero a esta “desconexión de la naturaleza” se le suma el hecho de que el uso continuo de la tecnología ha generado una adicción a la inmediatez en nuestros niños y niñas.
Es por ello que a muchos niños y adolescentes la naturaleza les aburre. “¡Qué rollo!¿para qué hemos venido hasta aquí?”, “¿y para esto andamos tanto?” “Qué aburrimiento, ¿cuándo volvemos?”, son frases que podemos escuchar tanto en una excursión familiar como en aquellas que organizan algunos profesores y profesoras conscientes de la importancia de enseñar en la naturaleza.
La naturaleza es demasiado lenta para ellos y esa adicción a la velocidad y la hiperestimulación está haciendo que el tiempo que pasan en contacto con la naturaleza sea cada vez menor y de peor calidad.
Por eso es más importante que nunca que los niños y niñas vuelvan a acostumbrarse a los ritmos naturales. Es importante que aprendan a observar con paciencia. Es fundamental que sepan aguardar hasta que las cosas ocurran. Y es básico para su desarrollo que aprendan a guardar silencio y a escuchar los sonidos de la naturaleza.
Sería bueno que los niños y las niñas aprendieran a levantar la vista hacia el cielo de vez en cuando y observar la aves que vuelan sobre sus cabezas ... porque no saben lo que se están perdiendo.
Y una forma de lograrlo es realizar excursiones al campo con frecuencia. Ya sea en familia o con sus compañeros de colegio, las excursiones ofrecen una oportunidad única para aprender infinidad de cosas que nunca ocurrirían en una pantalla.
En ACTIO Birding nos proponemos ayudar a los padres a lograrlo a través una experiencia para vivir con sus hijos: Birding en familia.
Las distintas opciones de Birding familiar que proponemos a lo largo del año son una oportunidad para vivir una apasionante experiencia en la naturaleza.
Porque para nosotros las aves, pero no únicamente las aves, serán la excusa perfecta para:
- mostrar el mundo “real”. Aquel que solo vemos cuando apagamos la pantalla y abandonamos el asfalto y el cemento para adentrarnos en campo.
- hacer experimentar a los niños y niñas que nos acompañan la naturaleza a través de todos los sentidos y al ritmo que suceden en la naturaleza
- enseñar curiosidades sobre la vida y el comportamiento de las aves (y otros animales) libres y en su medio natural
- vivir momentos en familia que se harán inolvidables
De la mano de Virgilio Beltrán, biólogo y educador ambiental, los niños y niñas ponen a prueba sus sentidos para identificar cantos, distinguir formas y colores, descubrir texturas y olores y de esa manera aprenden sobre las aves y otros seres vivos que comparten con ellas sus hábitats.
Además aprenden a manejar unos prismáticos, a consultar las guías de identificación de aves, a llevar un registro de observaciones y a observar a través de un telescopio. Pero todo ello en grupo. Compartiendo y colaborando con otros niños y niñas.
Durante las excursiones, recomendadas a partir de 7-8 años, nuestro guía cuenta anécdotas y curiosidades sobre la vida y el comportamiento de las aves y también ejerce de educador ambiental tratando de mostrar a niños o adultos, la importancia de la conservación de la biodiversidad y de estos espacios naturales.
Porque no se puede amar aquello que se desconoce y es más fácil defender y proteger aquello que se ama, “sembrar” en la mente y el corazón de los niños el respeto a los animales, las plantas y el medio ambiente es también uno de los objetivos de estas excursiones familiares.
Las actividades de Birding en familia se desarrollan en espacios naturales de fácil acceso, bien acondicionados para observación de aves y sin que sea necesario realizar grandes esfuerzos para disfrutarlas. Es pues también una manera de descubrir nuevos lugares de la geografía valenciana al alcance de las familias.
La Albufera de Valencia, el Estany de Cullera, la Marjal dels Moros, els Estanys de Almenara, la Desembocadura del río Mijares, el Azud de Tuejar, … son algunos de los lugares que proponemos.
Salir a descubrir un espacio natural acompañados por un guía que motive y ponga nombre a todo lo que aparece delante de sus ojos, contando curiosidades y detalles sobre ello, y acoplados al el ritmo propio de la Naturaleza, es una experiencia que no tiene comparación.
Facilitar una excusa a los padres y madres para que los niños y niñas abandonen por unas horas las pantallas. Hacer que vuelvan a disfrutar de las excursiones al campo, que experimenten sensaciones y se sientan libres para expresar emociones ….y que recuerden esos momentos como algo especial. En eso consiste nuestra propuesta de Birding en familia-
¿Se te ocurren una propuesta mejor para luchar contra el “Trastorno por Déficit de Naturaleza”?