En España cualquier padre o Rey Mago saben que los juguetes proceden en su gran mayoría de la Comunidad Valenciana, y especialmente de Alicante y de Ibi en el interior de Alicante. Pero lo que muy pocos padres y madres saben es que desde hace un siglo la población de Dénia en la costa alicantina fue la vanguardia de la industria juguetera en el Mediterráneo.
Y es que este fin de semana aprovechando que iba con mi familia a la Fiesta del Almendro el Flor en Alcalalí ( Marina Alta) me acerqué a Denia ( destino turistico familiar) a disfrutar de un paseo gratuito en la barco de la Panseta que ofrece la Fundación Balearia. Tras un recorrido a pie por el muelle del puerto con las niñas y tras pasar por el túnel de la guerra civil que cruza el castillo, llegamos a la puerta del Museo del juguete.
Había oído hablar de este Museo pero no me imaginaba que Denia tenia tanta tradición por la industria juguetera. Y es que no es casual que el museo esté en Denia ya que es un puerto donde se exportaba todo tipo de mercancías: además de estar el Museo justo al lado de la antigua vía del tren Dénia. Carcaixent , que baria la puerta al área de Valencia.
Lo que me resultó verdaderamente novedoso es descubrir que Dénia desde 1904 apostó por el juguete cuando los hermanos alemanes Ferchen instalaron en Denia la primera industria juguetera: la Metalúrgica Hispano-Alemana. Estos alemanes dedicaron su industria a la producción de juguetes de lata litografiada con maquinaria y modelos venidos de Alemania.
Aunque con el tiempo la industria del juguete en Denia fue progresando y adaptándose a los nuevos tiempos en cuanto a materiales y diseño y a las necesidades de las familias
En los años 50 el juguete de madera era el más vendido en España basado en triciclos, bicicletas, coches de pedales o patinetes.Entre los motivos de los juguetes destacaban los barcos de vela, carros tirados por caballos ,camiones, etc. Las cocinas de madera, el juego de bolos, el juego de anillas, o los fuertes con cowboys e indios evidencian la riqueza y la diversidad del juguete de madera de Dénia.
Y es que en todas las culturas ha existido el juego y el juguete como una necesidad de desarrollo del niño ya que los juguetes han ayudado a la vitalidad del cuerpo y la mente de los niños y han sido un sano complemento en su desarrollo
Si miramos con nuestros hijos las piezas del museo de Denia, tendremos resumen de una sociedad con sus costumbres, ritos, actividades laborales, medio de transporte de la época;,etc.. es como si damos a observar a los niños las formas de la vida adulta a medidas reducidas donde pueden conocer la realidad de otro tiempo reproducida en los juguetes. En cierta medida es una lección de historia. Los juguetes representan la cultura material de una sociedad, pero además indican sus valores muchos de los juguetes, que fomentan el rol de madre y ama de casa se han regalado siempre a las niñas. Los niños han tenido armas, coches, camiones, trenes, etc.
Por supuesto que la cultura del juguete ha cambiado mucho desde entonces y tanto las industrias jugueteras como las Asociaciones de padres y madres de alumnos trabajan para que el juguete no tenga componentes sexistas, racistas o de género, así como ayuden a las relaciones sociales. En parte creo que muchos de los padres añoran estos juguetes tradicionales que a buen seguro sería un buen regalo de cumpleaños o de Navidad que educaría a nuestros hijos y ayudará a comprender la historia de nuestra sociedad.