1. El faro de Peñíscola
Encontramos el faro de Peñíscola en su casco histórico, muy cerca del castillo. Fue inaugurado en el año 1899 y desde entonces ha sido reformado varias veces. Tiene una torre octogonal blanca de 11 metros de altura y al lado está la vivienda del farero. Esta vivienda fue usado hasta el año 2013. No se puede visitar el faro por dentro, pero desde la plaza delante del faro hay unas buenas vistas sobre la costa.
2. El faro de Oropesa del Mar
El faro de Oropesa del Mar encendió sus luces por primera vez el 1 de abril de 1857 y por eso es uno de los faros más longevos de la Comunitat Valenciana. Está junto a la Torre del Rey, una torre de vigía que se contruyó en 413 por orden de Fernando de Antequera. El faro fue rehabilitado en el año 2020 y se puede visitar. Además, ¡el faro sigue funcionando!
3. El faro de Cullera
El faro de Cullera se encendió por primera vez el 1 de agosto de 1858. Se encuentra en el Cabo de Cullera en el lugar conocido como Punta del Faro. Es un edificio circular rematado con una torre cónica. No se puede visitar por dentro, pero podéis verlo en este vídeo.
4. El faro de Albir
El faro de Albir destaca por su emplazamiento en el Parque Natural de la Sierra Helada. Además se puede llegar hasta el faro haciendo una ruta de senderismo. Esta ruta es fácil y divertido para hacer con niños. El sendero está asfaltado, es libre de tráfico, y tiene unas vistas impresionantes sobre el Mediterráneo.
5. Faro del Cabo de San Antonio
Este faro se encuentra en el Parque Natural del Montgó. Si estáis en Jávea, vale la pena acercarse para disfrutar de las vistas espectaculares que hay sobre el mar y la costa. El faro fue encendido por primera vez en 1855. No se puede visitar, pero es un lugar precioso para ver por ejemplo el atardecer.